Indicadores de la eficiencia operativa: cómo medir y mejorar

Puede parecer sencillo marcar objetivos y establecer estrategias para llegar a ellos. Pero, ¿resulta tan sencillo hacer una medición y establecer un plan de mejora? Los indicadores de la eficiencia operativa tienen un papel muy importante en lo que vamos a contarte.

Si, para ti, la respuesta a la anterior pregunta también es no, hemos preparado este artículo para profundizar en los principales indicadores de eficiencia operativa, y sobre todo en cómo medir los resultados para asegurarnos de que estamos mejorando procesos operativos.

¡Quédate con nosotros y lee atentamente!

¿Qué es la eficiencia operativa?

Lo primero que vamos a hacer es definir la eficiencia operativa para entender nuestro punto de partida: es la clave para optimizar tus procesos y, en última instancia, alcanzar tus metas empresariales de manera más efectiva. En el mundo empresarial, se trata de realizar tareas, procesos y operaciones con la menor cantidad de recursos posible, ya sea en términos de tiempo, económicos o de personal. 

Para conseguir una visión completa del funcionamiento operativo de tu empresa, es necesario analizar cuáles son los indicadores que miden la eficiencia operativa. En el siguiente punto, vamos a estudiar los indicadores y cómo impacta su medición en tu empresa.

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Los indicadores de eficiencia operativa

FCO

El primero de los indicadores de eficiencia operativa es el Flujo de Caja Operativo (FCO), el cual guía la evaluación de la eficiencia operativa de una empresa desde múltiples perspectivas. Su relevancia radica en su capacidad para proporcionar una imagen integral de la salud financiera, centrándose en la operativa diaria y su impacto en la liquidez. 

Al reflejar el beneficio operativo desde la perspectiva de la liquidez, el FCO va más allá de las ganancias en papel. Tras examinar la capacidad de la empresa para generar efectivo líquido, se convierte en un indicador crítico de su eficiencia para convertir operaciones en recursos disponibles, asegurando una posición financiera sólida.

OEE

El Overall Equipment Effectiveness (OEE) se destaca por su enfoque integral al evaluar la eficiencia general del equipamiento. Se compone de tres elementos fundamentales: 

• La disponibilidad, que mide el tiempo producido en comparación con el tiempo programado. 
• El rendimiento, que evalúa la producción real frente a la teórica
• La calidad, que examina la relación entre elementos según los parámetros de calidad y los ítems totales.

Multiplicar estos tres elementos revela el grado de eficiencia de los equipamientos evaluados.

A través de las áreas de disponibilidad, rendimiento y calidad, el OEE desglosa los factores que impactan directamente en la productividad global de la empresa. Este desglose proporciona una visión detallada de dónde se encuentran los puntos críticos.

ROI “retorno de inversión”

Entre los indicadores de eficiencia operativa encontramos el Retorno de Inversión, conocido como ROI. Este indicador considera el capital disponible y los costes generados para realizar una acción específica, ya sea la adquisición de nuevas tecnologías, la reorganización de procesos, la gestión del tiempo o la administración de recursos humanos. 

El ROI permite evaluar cómo ciertas iniciativas para mejorar la eficiencia operativa contribuyen a los resultados de la empresa. Esta métrica se convierte en una herramienta invaluable para optimizar inversiones existentes y planificar metas basadas en resultados tangibles.

NPS “Net Promoter Score”

El Net Promoter Score (NPS) es el último de los indicadores de eficiencia operativa de los que te queremos hablar. 

Este indicador es una medida de la lealtad y satisfacción del cliente con un producto o servicio. Al observar este indicador, podemos obtener una visión clara de la experiencia que la empresa brinda a su consumidor. Este enfoque se sumerge en las percepciones del cliente, ofreciendo información valiosa para identificar áreas de mejora en los procesos internos.

Cómo mejorar la eficiencia operativa

Una vez que hemos explorado las claves de los indicadores de eficiencia operativa, y cómo utilizarlos como medidores, surge la inevitable pregunta: ¿cómo mejorar? 

Aquí te presentamos algunas estrategias prácticas y efectivas que optimizarán los procesos de tu empresa y elevarán la experiencia del cliente, fortaleciendo así la eficiencia operativa de tu empresa.

1- Establecer los objetivos

El primer paso esencial para transformar la eficiencia operativa de tu empresa es anclarla en objetivos claros y específicos. Necesitas saber a dónde quieres llegar para encontrar el camino más eficiente. Aquí te detallamos cómo establecer objetivos que guíen tu travesía hacia la optimización:

• Sé preciso y específico sobre qué áreas quieres optimizar. ¿Es la velocidad de producción, la reducción de costes, o quizás la calidad del servicio? 
• Es importante ser ambicioso en tus metas, pero tienes que ser realista. Evalúa tu capacidad actual y los recursos disponibles. 
• Los objetivos deben alinearse estrechamente con la estrategia general de tu empresa. Debes preguntarte cómo contribuirá la optimización de estos procesos a los objetivos más amplios de la empresa.
• Estos objetivos deben ser medibles con los indicadores de eficiencia operativa de los que te hemos hablado en el punto anterior.
• Traza un plan de acción detallado. Puedes desglosar cada objetivo en pasos concretos y asignar responsabilidades. Proporcionarás una hoja de ruta clara para todos los involucrados.

2- Automatizar ciertas tareas

En la búsqueda de la eficiencia operativa, la automatización es un pilar en la revolución empresarial. Automatizar ciertas tareas es un salto importante hacia la optimización y la liberación de potencial:

• El primer paso es identificar las tareas que consumen tiempo y recursos de manera repetitiva. Por ejemplo: la entrada de datos, la gestión de correos electrónicos, etc. Cada tarea manual que pueda ser predecible se convierte en un candidato para la automatización.

• La automatización también agiliza procesos completos. Los empleados podrán enfocarse en actividades más estratégicas y creativas. La eficiencia no solo radica en hacer las cosas más rápido, sino en liberar el potencial humano.

• Los errores humanos son inevitables, especialmente en tareas mecánicas. La automatización elimina este riesgo, asegurando una consistencia sin fisuras en cada ejecución. 

• Automatizar tareas implica la adopción de tecnología moderna. Pasando por software especializado e incluso soluciones de inteligencia artificial. La inversión en herramientas avanzadas, además, posiciona a la empresa en la vanguardia de la innovación.

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3- Identificar errores

Para mejorar la eficiencia operativa, la identificación proactiva de errores es una brújula hacia la mejora continua. 

Analizando los indicadores de la eficiencia operativa clave, de los que te hemos hablado en el punto anterior, estarás fomentando una cultura de retroalimentación. Con esta medición, la empresa puede anticipar y abordar errores antes de que impacten significativamente. Para lograr este objetivo, puedes llevar a cabo auditorías periódicas para acelerar la detección y mejorar la precisión. 

Establecer un sistema de mejora continua asegura que la empresa esté constantemente vigilante y adaptable. La identificación de errores también impulsa la evolución constante en el viaje hacia la eficiencia operativa.

4- Seguir la carga de trabajo del equipo

Es esencial seguir de cerca la carga de trabajo del equipo para mantener un equilibrio entre eficiencia operativa y bienestar laboral. Es importante implementar un sistema de gestión que permita asignar y redistribuir tareas equitativamente para asegurar que cada miembro del equipo contribuya efectivamente. 

Monitorear la carga de trabajo mejora la productividad, además de promover un entorno de trabajo saludable y equilibrado. La tecnología desempeña un papel crucial al proporcionar herramientas para visualizar la carga de trabajo y ajustarla según sea necesario. Este enfoque estratégico optimiza la eficiencia operativa, y también fortalece la colaboración y el rendimiento sostenible del equipo.

Este camino es un viaje dinámico que requiere una comprensión profunda de los indicadores de la eficiencia operativa. En este contexto, en multianau Facility Services destacamos como referentes en la oferta de servicios integrales, especialmente en el ámbito de la limpieza. Nuestro enfoque se alinea perfectamente con las claves que hemos explorado en este artículo, utilizando tecnologías avanzadas y estrategias de mejora continua para garantizar la optimización de procesos y la entrega de servicios de alta calidad. 
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